Un hombre de 80 años de edad apareció tirado en una cuneta cuando regresaba a su casa en ambulancia, tras ser atendido en el hospital por una caída.
El anciano sufrió una caída a causa de la nieve, y fue trasladado al Hospital Río Carrión de Palencia. Allí le efectuaron pruebas y le fue diagnosticada una microfisura en la pierna, dándole el alta tras no ser preciso su ingreso hospitalario.
Se decidió entonces que fuera trasladado de nuevo a su domicilio en una ambulancia. Sobre las 19.00 horas, Cecilio P. B. montaba en el vehículo camino de Barruelo, mientras su hijo, que le acompañaba en el hospital, llamó por teléfono a su madre para informarle de que su padre volvía en ambulancia.
Alrededor de las 20.40 horas, el hijo del anciano, que había regresasado a su domicilio en Burgos, llamó a la casa de sus padres en Barruelo, informándole su madre de que Cecilio P. B. todavía no había llegado. Según aseguró el conductor, en el momento en que llegó a la localidad, se percató de que Cecilio P. B. no se encontraba dentro de la ambulancia.
Apenas cinco minutos más tarde, la familia recibió una llamada de la Guardia Civil de Barruelo en la que se le comunicaba que su padre había sido encontrado en el punto kilométrico 95 de la N-611, en las cercanía de Aguilar de Campoo, por una patrulla de Tráfico de Herrera de Pisuerga.
El hombre estaba en una cuneta de la carretera, desorientado, con múltiples contusiones en el cuerpo y la ropa destrozada, sin saber lo que hacía allí ni cómo había llegado. Fue derivado de nuevo al Hospital Río Carrión de Palencia, y al día siguiente le dieron el alta.
Al pedir explicaciones, la versión del conductor es que Cecilio P. B tuvo que tirarse en marcha. Al parecer, en su declaración a la Guardia Civil, el conductor de la ambulancia manifestó no saber en qué momento pudo bajarse el hombre, ya que el vehículo tiene compartimentos diferenciados y no cuenta con bloqueo de puertas en su interior.
Se decidió entonces que fuera trasladado de nuevo a su domicilio en una ambulancia. Sobre las 19.00 horas, Cecilio P. B. montaba en el vehículo camino de Barruelo, mientras su hijo, que le acompañaba en el hospital, llamó por teléfono a su madre para informarle de que su padre volvía en ambulancia.
Alrededor de las 20.40 horas, el hijo del anciano, que había regresasado a su domicilio en Burgos, llamó a la casa de sus padres en Barruelo, informándole su madre de que Cecilio P. B. todavía no había llegado. Según aseguró el conductor, en el momento en que llegó a la localidad, se percató de que Cecilio P. B. no se encontraba dentro de la ambulancia.
Apenas cinco minutos más tarde, la familia recibió una llamada de la Guardia Civil de Barruelo en la que se le comunicaba que su padre había sido encontrado en el punto kilométrico 95 de la N-611, en las cercanía de Aguilar de Campoo, por una patrulla de Tráfico de Herrera de Pisuerga.
El hombre estaba en una cuneta de la carretera, desorientado, con múltiples contusiones en el cuerpo y la ropa destrozada, sin saber lo que hacía allí ni cómo había llegado. Fue derivado de nuevo al Hospital Río Carrión de Palencia, y al día siguiente le dieron el alta.
Al pedir explicaciones, la versión del conductor es que Cecilio P. B tuvo que tirarse en marcha. Al parecer, en su declaración a la Guardia Civil, el conductor de la ambulancia manifestó no saber en qué momento pudo bajarse el hombre, ya que el vehículo tiene compartimentos diferenciados y no cuenta con bloqueo de puertas en su interior.
FUENTE: 20 MINUTOS
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡¡Anímate y deja tus comentarios!!