Un sacerdote católico, acusado del robo de cientos de miles de dólares de las ofrendas de su Iglesia para usarlos en gastos fastuosos, compras de casas y viajes a casinos de Las Vegas, fue condenado este miércoles a 4 años de cárcel, informó un periódico local.
El padre Francis Guinan, de 66 años, había sido declarado culpable por un jurado en febrero por robo de hasta 100.000 dólares en donaciones de los fieles, aunque los fiscales estatales lo acusaban de apropiarse entre 2003 y 2005 de un total de casi medio millón de dólares para destinarlos a compras de casas de alto nivel, viajes a casinos de Las Vegas y otros gastos de lujo. Otro sacerdote, John Skehan, de 81 años, que ejerció en la misma iglesia católica, San Vicente Ferrer, en Delray Beach (Florida, EEUU), se había declarado culpable de robo del dinero de los fieles para similares fines y fue sentenciado el martes a 14 meses de prisión y restitución de 700.000 dólares. Antes de anunciar la sentencia a Guinan, que fue suspendido como sacerdote, la jueza Krista Marx, de un tribunal en West Palm Beach, calificó sus acciones como "avaricia y descaro absoluto", según el diario 'Palm Beach Post'. Y le dijo además que por haber traicionado la confianza de los fieles de la comunidad donde ofició como sacerdote "su legado será siempre el del robo y el engaño". Además de la condena a prisión, la jueza dijo que el religioso deberá restituir 100.000 dólares. Guinan había argumentado durante el juicio que tenía entendido que los sacerdotes podían gastar hasta 50.000 dólares, incluso en un único objeto, sin dar explicaciones a su diócesis.
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